Pues mira que va el Sevilla y me quita la razón. Que yo empeñado en que la liga la va ganar alguno de siempre (pensaba a principios que sería el aburrido Madrid abonado al capellismo del 1-0), Madrid, Barsa o Valencia, pero el equipo andaluz, sacudiéndose de vez en cuando al vértigo, dio un golpe en la mesa y volvió al liderato. Normalmente este tipo de equipos sorpresa (estar primero, aun siendo campeón de la UEFA y la Supercopa europea para el Sevillismo a estas alturas es una sorpresa) suelen desinflarse de forma definitiva, no son capaces de remontar el vuelo. No es el caso del Sevilla, que tiene los altibajos de cualquier grande (porque esto es un deporte, no matemática). Me gusta la idea (pese a la animadversión que su presidente o algunos leñadores en su defensa me puedan generar) que un equipo como él esté en lo más alto. Baño de humilad para los grandes, y toma tópico al canto: se gana sudando la camiseta, no solo por llevarla.
Y de un blanco a otro blanco. Un robo, un auténtico robo lo de ayer en el Bernabeu, la ley de la compensación, bla, bla, bla, bla (pese a todo, el tiempo da y quita razones a los llorones, al Cesar lo que es del Cesar). Ahora somos los madridistas los que clamamos al cielo (y que lo haga Pedja no deja de ser curioso, cuando él era poco aficionado a la verticalidad). Es la vieja historia de siempre, el empedrado tiene la culpa. El Madrid es un equipo plano, tristón, mediocre y mal planificado, diga lo que diga el árbitro. Que supongo, como todos, que se equivocaría. Pero viendo las imágenes no resulta tan raro equivocarse, en todos los penaltis si al jugador le hubieran dado un prima por quedarse en pie, ni uno hubiera besado el cesped. Que es notar la pierna, oiga, y llegar el mareo. En fin, que como siempre a mi los árbitros me dan igual, porque al final se equivocarán con todos. (Que sí, Toni, que sí, no me seas cabezota).
No quisiera acabar la crónica sin hablar del Atleti, que perdió con un buen equipo (Recre) y parece ser que en un bueno partido. Para los rojiblancos, a estas alturas, estar a cuatro puntos de la Champions debería ser uan buena noticia. Si superaran el miedo al Calderón (el partidazo con el Madrid demuestra que se trata de algo de motivación y cabeza) estaría seguro en la pomada (que diría Maroto) por la champions.
Por abajo más de lo mismo, si no sube el Alavés puede que el año que viene no se vea ikurriña alguna en campos de primera. Ah, y definitivamente el fútbol se ha vuelto loco, ¿sabías que Materazzi ha sido nombrado hombre de paz?. Con su historial de patadas, cabezazos y demás no quisiera cruzarme con el hombre de guerra.
Y si te preguntas quien es el de la foto, es el extremo izquierdo (zurdo cerrado) que le dará al Madrid la Copa de Europa 2026. ¡¡¡ Felicidades, Fer !!!.
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